No dejes nunca de soñar porque tan solo en sueños el hombre puede ser libre.

miércoles, 1 de septiembre de 2010

La batería

Buenas a todos. ¿Cómo lleváis el comienzo del nuevo mes? Ya es Septiembre. Sin duda pasa el tiempo muy deprisa, y justo hoy he vuelto a recordar otro sueño, y menos mal, así que os dejo con él:

"Era de día, hacía un sol magnífico y la temperatura era cálida. Un día perfecto para sangre frías como yo, así que decidí aprovechar esta maravilla divina y fui a dar un paseo. Como siempre, salí con mi música y los auriculares puestos, sin pensar en nada mas y dejándome llevar por la música. Sin duda estos paseos son los mejores. Seguí andando y andando tranquilamente, sin importar la hora. Y andando y andando llegué a Madrid capital (Vivo a 28 kms de Madrid capital, solo digo eso). De tanto andar me entró una sed terrible, así que paré en un bar y me compré una botella de agua. El sol calentaba a estas alturas y estaba bastante sofocada por el largo paseo así que me metí derechita a un centro comercial. Oh amados centros comerciales, que siempre tenéis de todo y además siempre se está fresquito. En el centro comercial había millones de tiendas, el 98% de ellas eran de ropa. Ropa, estaba harta de la ropa, y no quería seguir viendo más con lo que seguí caminando. A lo lejos vi una tienda especial. Era de música. Sin pensármelo dos veces entré. Menuda tienda de música, era enorme. Había millones de guitarras, pianos de cola fantásticos y baterías con todos sus complementos. Baterías. Desde pequeña siempre me había encantado este instrumento, siempre había querido tocarlo y hoy iba a aprovechar el momento. Me aproximé a una batería, tenía muchas ganas de tocarla pero no pensaba en tocar ahí delante de la gente y más sabiendo que no tengo ni idea de tocarlo, no quería hacer el ridículo. Pero hoy era mi día de suerte, se me acercó una dependienta y me condujo hasta un estudio de música insonorizado. Insonorizado. El deseo de toda patosa como yo y con lo cual el mejor lugar para tocar y cantar sin que nadie me oiga. Manos a la obra, me puse a tocar la batería. Joder que bien tocaba para ser la primera vez. Gracias a mi mente e imaginación mientras tocaba yo ya pensaba en meterme en un grupo de música y dar conciertos a diestro y siniestro ya que al parecer era bastante buena con la batería. Finalmente terminé tocando y muy satisfecha me fui a mi casa. Algún día me compraré esa batería."

Una vez más, gracias a todos por leer ;).

2 comentarios:

  1. Jajajaja...¡suena a un sueño que tendría yo! A mí también me gustaría aprender a tocar la batería :)
    Y la próxima vez, no vayas andando 28 km., por dios xDDD
    Un beso :-*

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  2. ¡Me gustaría tener ese sueño! Me encanta la batería, los tambores y cualquier instrumento de percusión. Como no tengo ninguno no me queda más remedio que tamborilear con los dedos. Jaja.
    Con suerte, si me concentro, sueñe lo mismo que tú :)

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